La tecnología puede ayudar a las personas de cualquier edad a manejar sus desafíos con la lectura.
El texto-a-voz y los audiolibros son dos ejemplos de tecnología de asistencia para la lectura.
Muchas herramientas de tecnología de asistencia funcionan en dispositivos digitales, pero algunas de las herramientas más útiles no son digitales.
La tecnología puede ser un salvavidas para las personas que tienen dificultad para leer. Un audiolibro, por ejemplo, les permite escuchar una historia que tal vez no podrían leer en un libro tradicional.
Las herramientas de (AT, por sus siglas en inglés) para la lectura no son costosas y son fáciles de conseguir. Estas herramientas están integradas en computadoras, teléfonos y otros dispositivos. Pero también existen opciones de baja tecnología. Algunas de las herramientas de tecnología de asistencia más útiles para la lectura no son digitales.
Tenga en cuenta que el uso de la tecnología de asistencia no impide que la persona aprenda a leer. Los expertos dicen que los audiolibros pueden ayudar a los niños a convertirse en mejores lectores. Además, la tecnología de asistencia puede ayudar a las personas a sentirse más seguras e independientes.
Al mismo tiempo, si alguien tiene dificultad para leer, es importante que reciba la enseñanza adecuada para progresar. Es probable que las herramientas de tecnología de asistencia por sí solas no logren mejorar las habilidades lectoras.
Profundice
Este es un resumen de las herramientas de tecnología de asistencia más útiles para leer.
El texto-a-voz (TTS, por sus siglas en inglés) permite ver el texto y al mismo tiempo escucharlo en voz alta. Hay que hacer clic sobre las palabras o resaltarlas para que sean leídas por una voz generada por computadora. El texto-a-voz funciona con cualquier texto digital.
El reconocimiento óptico de caracteres (OCR, por sus siglas en inglés) lee en voz alta el texto de imágenes o archivos de imágenes. Se puede usar esta herramienta con hojas de actividades o documentos impresos, tomándoles una foto o escaneándolos. Al igual que el texto-a-voz, el reconocimiento óptico de caracteres utiliza voces generadas por computadora.
Los organizadores gráficos son herramientas visuales que ayudan a que usted le pueda dar seguimiento a la información a medida que la lee. Los organizadores pueden ser digitales o de lápiz y papel.
Otras herramientas que puede probar son:
Herramientas para hacer anotaciones que le permiten tomar apuntes y escribir comentarios mientras lee.
Controles de pantalla que permiten cambiar el tipo, tamaño y color de la letra, así como el espaciado del texto en la pantalla.
Diccionarios y tesauros que permiten buscar palabras que no entiende cuando está leyendo.
Usted puede encontrar herramientas de baja tecnología, como notas adhesivas y resaltadores en cualquier tienda que venda materiales escolares o de oficina. Las escuelas o los maestros también podrían proporcionar herramientas como guías de lectura u organizadores gráficos.
Las herramientas de tecnología de asistencia para la lectura también forman parte de muchas de las plataformas informáticas:
Las computadoras de escritorio y portátiles generalmente tienen herramientas de tecnología de asistencia integradas, como el texto-a-voz. Usted puede descargar programas de software para la lectura para agregar más funciones a las computadoras.
Los dispositivos móviles (como tabletas y teléfonos) también tienen tecnología de asistencia integrada. Usted puede añadir más herramientas para la lectura a los dispositivos móviles descargando aplicaciones.
Los chromebooks (y navegadores Chrome en cualquier dispositivo) también tienen tecnología de asistencia integrada. Usted puede agregar aplicaciones y extensiones de Chrome para ayudar aún más con la lectura.
Para hacer el mejor uso de las herramientas de tecnología de asistencia para la lectura, comience por entender qué tipos de herramientas están disponibles. Es útil tener una idea general.
Luego trate de encontrar la herramienta adecuada para el tipo de desafío con la lectura en particular. Si no sabe por dónde comenzar, pruebe el texto-a-voz.
Escuche a una mamá y experta explicar cómo el texto-a-voz y otras herramientas de tecnología de asistencia ayudaron a su hijo con dislexia.
Nota: Este video de YouTube tiene subtítulos en español. Comience a reproducir el video. En la parte inferior de la pantalla vaya a "Settings", seleccione "Subtitles" y haga clic en la opción "Spanish". Asegúrese de que la función "CC" esté activa.