Estrategias para enseñar a los niños autorregulación al escribir
Los estudiantes que piensan y aprenden diferente puede que tengan problemas con la autorregulación. Cuando se trata de escribir, la autorregulación les permite gestionar tareas y supervisar el progreso (también llamado autocontrol), entre otras habilidades importantes.
Existen muchas formas en la que usted puede usar estrategias instruccionales para ayudar a los estudiantes a mejorar sus habilidades para escribir. A continuación encontrará seis estrategias en un enfoque de enseñanza basado en evidencias llamada desarrollo de estrategias de autorregulación (SRSD, por sus siglas en inglés). Estas estrategias pueden ser difíciles de aprender para los estudiantes. Por lo tanto, es mejor que prueben una estrategia a la vez.
Estrategia #1: Analizar la tarea
Cuando los estudiantes empiezan una tarea escrita, a menudo lo hacen sin entender claramente qué se supone que deben hacer. Por ejemplo, podrían escribir varias páginas del reporte de un libro antes de darse cuenta de que se suponía que debían escribir una opinión acerca del personaje principal. Esto puede resultar en frustración y pérdida de tiempo de clase.
Cómo enseñar esta estrategia: Pregunte a su hijo de qué trata la tarea que está por empezar a escribir. Haga que lea o escuche las instrucciones en voz alta y explique la tarea con sus propias palabras. Durante este proceso puede ser útil que juntos resalten o subrayen partes del escrito que sean importantes.
Para encontrar otras ideas, lea las sugerencias de un maestro para ayudar a su hijo a entender qué tiene que hacer en la tarea escrita que le asignaron.
Estrategia #2: Establecer metas
Aún cuando el estudiante entiende lo que tiene que hacer, puede que empiece a escribir sin tener una meta en mente. Podría estar tan enfocado en terminar la tarea que no se pregunta cuál es su propósito. Esto puede llevar a un callejón sin salida. Sin tener metas claramente establecidas es difícil que los niños mejoren sus habilidades.
Cómo enseñar esta estrategia: Explique a su hijo que tener metas claras puede facilitar hacer la tarea y mejorar la escritura.
Intenten establecer tres metas. Una podría ser escribir cierto número de palabras para la tarea. Otra podría ser facilitar el proceso de escribir usando organizadores gráficos. Una meta más complicada podría ser que mostrara las emociones de los personajes a través de un diálogo en lugar de solo describirlas.
Estrategia #3: Manejar la tarea
Es común que los estudiantes no administren su tiempo apropiadamente cuando están escribiendo un ensayo. Es posible que no reserven tiempo suficiente para completarlo. También puede que pospongan el inicio de la tarea hasta 10 minutos antes de que finalice el período.
Cómo enseñar esta estrategia: Prepare un plan claro con su hijo para hacer el proyecto de escritura. Una manera sencilla de empezar es preguntarle cuánto tiempo cree que tardará en hacerlo. Acuerden un lapso de tiempo para llevar a cabo el plan y cuándo habrá un descanso. Hable de cómo manejar distracciones, como tener hambre o querer revisar las redes sociales.
Aprenda cómo ayudar a su hijo a terminar una tarea escrita dividiéndola en partes.
Estrategia #4: Autoevaluación
Una parte importante de escribir es revisar lo que se ha escrito y ver si se necesitan hacer cambios. Los escritores diestros lo hacen continuamente a medida que escriben. La niños con dificultades con la escritura se benefician si se les enseña cómo evaluar su escritura.
Cómo enseñar esta estrategia: Enseñe a su hijo cuándo es el momento de detenerse a evaluar lo que ha escrito. Por ejemplo, los escritores experimentados generalmente releen cada párrafo en cuanto lo terminan. Proporciónele preguntas específicas que pueda hacerse sobre cada párrafo: ¿Incluye todas las ideas expuestas en el organizador gráfico? ¿Aborda lo que requiere la tarea? Si la respuesta es no, ¿qué cambios se necesitan?
La autoevaluación puede volverse un hábito practicándola y recibiendo comentarios al respecto.
Estrategia #5: Autorrefuerzo
No es una sorpresa que a los estudiantes que tienen problemas con la escritura no les guste el proceso de escribir. Puede que se sientan avergonzados de sus habilidades. Por ejemplo, cometer un error ortográfico puede convertirse en una obsesión. Estos pensamientos negativos podrían abrumarlos y ser un obstáculo para que terminen de escribir el proyecto que les fue asignado.
Cómo enseñar esta estrategia: Use elogios específicos y basados en el esfuerzo cuando su hijo muestre progreso en el proceso de escribir. Por ejemplo, felicítelo por su esfuerzo y concentración cuando termine un párrafo. Si termina la tarea en el tiempo previsto puede decirle: “Administraste muy bien el tiempo asignado para terminarla”.
Estrategia #6: Reflexionar
Otra estrategia importante que se usa al terminar de escribir es: Hacer una pausa para reflexionar sobre la experiencia. ¿Alcanzó las metas que acordaron juntos? ¿Qué estrategias funcionaron? ¿Cuáles no funcionaron y por qué? Reflexionar es esencial para mejorar.
Cómo enseñar esta estrategia: Hable con su hijo después que haya terminado la tarea de escritura para averiguar cómo le fue. Pregúntele si encontró obstáculos como distracciones o pensamientos negativos. Discutan qué podría hacer la próxima vez para que el proceso sea más fácil.
Revise las estrategias que usó su hijo y analicen si funcionaron. Por ejemplo, si su hijo intentó establecer metas, pregúntele si las alcanzó. Si se utilizó una estrategia de planificación, analicen cómo funcionó el plan.
Tenga presente que la escritura es una de las habilidades más difíciles de aprender. Enseñar la autorregulación en la escritura puede ayudar a los niños a convertirse en mejores escritores con el tiempo.
Conozca por qué algunos niños tienen dificultad para escribir sus ideas.