Por qué la dislexia no es detectada en algunos estudiantes
Fumiko Hoeft es una psiquiatra y neurocientífica en University of California, San Francisco. También es una de las investigadoras sobre la más reconocidas a nivel mundial. En un artículo publicado en la revista The New Yorker habló sobre las investigaciones que ha realizado en personas con una condición podría parecer inusual: “dislexia oculta”.
Las personas con dislexia oculta tienen dificultad para pronunciar (o ) las palabras de la misma manera que las personas con dislexia “clásica”. Sin embargo, sus calificaciones en pruebas de suelen estar por encima del promedio o inclusive son excelentes.
Lo que el artículo en The New Yorker no dice es lo siguiente: si las personas con dislexia oculta pueden comprender bien lo que leen, ¿es importante identificarlas? La respuesta es ¡sí!
Los estudiantes con dislexia oculta suelen tener dificultades en el salón de clases. Pero rara vez reciben la ayuda que necesitan. Es por eso que padres y maestros necesitan estar enterados.
La “dislexia oculta” es un término que fue introducido en 2005. Dado que estos estudiantes obtienen buenos puntajes en las pruebas de comprensión lectora, la mayoría de las personas piensa que no pueden tener dislexia. Pero estos estudiantes también muestran la característica típica de la dislexia: les cuesta la y la decodificación.
Luego de que describiéramos la dislexia oculta por primera vez, las personas debatieron sobre si estas personas debían ser consideradas disléxicas. Ahora sabemos la respuesta. Como expuso la Dra. Hoeft en The New Yorker, utilizó resonancia magnética para estudiar el cerebro de estudiantes con dislexia oculta. Encontró que sus conexiones cerebrales tienen las características clásicas de la dislexia. Esto confirmó que son personas con dislexia.
También encontró que cuando leían, se observaba una mayor actividad en partes del cerebro que ayudan con la función ejecutiva y el autocontrol. Su comprensión parecía ser buena. Esto se debe a que compensaron su dificultad para decodificar utilizando sus habilidades de resolución de problemas.
Aun con esas habilidades, los estudiantes con dislexia oculta suelen tener dificultades en la escuela con:
Lectura de palabras nuevas (especialmente largas)
Lectura en voz alta
Velocidad y precisión de la lectura en silencio
Ortografía
Escritura (tanto su mecánica como la velocidad y cantidad de información)
Debido a sus dificultades con estas habilidades básicas, con frecuencia les cuesta realizar estas tareas más complejas:
Lectura de pasajes cortos. (Les cuesta utilizar el contexto para adivinar las palabras que no pueden pronunciar fonéticamente. Por ejemplo, preguntas y respuestas en exámenes de opción múltiple o problemas matemáticos de lógica).
Lectura de pasajes de un tema desconocido. (Les cuesta usar su conocimiento para adivinar las palabras que no pueden pronunciar fonéticamente).
Lectura de pasajes que contienen muchas palabras desconocidas o términos nuevos.(Esto es común en ciencias naturales o sociales. O en temas que se refieren a culturas o idiomas extranjeros).
Mantenerse al día con tareas largas de lectura o escritura.
Para muchos estudiantes con dislexia oculta, las dificultades en la escuela sólo se evidencian cuando aumenta la cantidad de trabajo, o se vuelve muy complicado. Es ahí cuando no pueden mantener el ritmo esforzándose más. A menudo, esto no sucede sino hasta el bachillerato o la universidad.
Muchos estudiantes con dislexia oculta tienen dificultad con la escritura. Pero sus problemas con la lectura pasan desapercibidos por lo que son diagnosticados con . Otros son diagnosticados con ya que cometen muchos “errores por descuido”. Pero como demostró la Dra. Hoeft en su investigación, por lo general tienen una gran capacidad de concentración y atención.
Debido a estos retos, muchos estudiantes con dislexia oculta necesitan los mismos apoyos que otros estudiantes con dislexia clásica:
Enseñanza de conciencia fonémica y fonética, donde el progreso se basa en la habilidad para decodificar y no en la comprensión.
Lectores de texto-a-voz, especialmente para tareas de lectura largas.
Un buen programa de mecanografía para ayudarlos con la ortografía y la escritura.
Tiempo adicional en los exámenes.
Expectativas individuales para la escritura.
Los estudiantes con dislexia oculta a menudo tienen dificultades en la escuela. Pero por lo general son muy hábiles en razonamiento y en la solución de problemas. Con frecuencia les va bien cuando son adultos. Así que tenga presente: Cuando vea a un estudiante brillante que entiende la mayor parte de lo que lee, pero que tiene dificultad con la lectura oral, la pronunciación de palabras nuevas que son muy largas, la ortografía y muchas veces con la escritura, piense en la dislexia oculta.