Adaptaciones en el aula para el trastorno del procesamiento auditivo
El Trastorno del procesamiento auditivo: Lo que necesita saber (APD, por sus siglas en inglés) dificulta que los estudiantes procesen y entiendan los sonidos. Eso puede obstaculizar el aprendizaje, desde concentrarse en lo que el maestro dice hasta aprender a leer.
A continuación algunos ejemplos de adaptaciones que los maestros pueden usar para ayudar con el trastorno del procesamiento auditivo.
Asientos, materiales y rutinas en el aula
Proporcionar un lugar tranquilo para el trabajo independiente.
Permitir que el estudiante se siente cerca del maestro y alejado de distracciones sonoras, como puertas y ventanas.
Asegurarse de que el estudiante entiende la tarea que ha sido asignada.
Proveer un dispositivo de asistencia auditiva para facilitar que el estudiante distinga la voz del maestro.
Proporcionar más tiempo en los exámenes.
Dar instrucciones y asignar tareas
Dar instrucciones paso a paso y pedir al estudiante que las repita.
Usar frases para captar la atención como: “Esto es importante aprender porque…”.
Acordar con el estudiante una señal no verbal para indicar que se ha dicho algo importante.
Repetir en voz alta las instrucciones, los deberes y los horarios, y explíquelos si fuera necesario.
Repetir la información importante a lo largo de la lección, y usar palabras diferentes para que se entienda si fuera necesario.
Utilizar herramientas visuales, imágenes y gestos para realzar y apoyar las lecciones habladas.
Dividir los exámenes o las instrucciones impartidas en clase en pasos cortos y por escrito.
Destacar palabras e ideas importantes en las hojas de trabajo.
Dar instrucciones escritas para hacer la tarea.
Proporcionar una lista de las tareas asignadas para la semana (o el día).
Presentación de nuevos conceptos/lecciones
Hablar con claridad y lentamente al presentar la información.
Proveer al estudiante información sobre conceptos nuevos antes de enseñárselos a toda la clase (para que se familiarice con ellos con antelación).
Proporcionar una lista o destacar las palabras y conceptos importantes de la próxima lección.
Repasar brevemente la lección previa antes de enseñar algo nuevo.
Proporcionar al estudiante un resumen de la lección.
Calificar al estudiante en base a su conocimiento de la lección. (Por ejemplo, no califique los errores ortográficos si eso no es lo que se esperaba que aprendiera el estudiante).
¿Qué sigue?
Aprenda sobre la tecnología de asistencia para el procesamiento auditivo. Conozca lo que una mamá quiere que los demás sepan acerca del trastorno del procesamiento auditivo.