La recuperación de palabras (o encontrar la palabra correcta) es una habilidad clave para la comunicación.
Las personas utilizan las habilidades de recuperación de palabras cuando eligen palabras específicas para comunicar sus ideas.
Las personas que tienen dificultad con la recuperación de palabras suelen tener problemas para encontrar la palabra correcta para lo que quieren decir o escribir.
Al hablar o escribir, elegimos palabras específicas para comunicar lo que queremos decir. Escogemos las palabras para describir de manera gráfica la historia que estamos contando. Esta habilidad se llama recuperación de palabras (o encontrar la palabra correcta).
Los términos "recuperación de palabras" y "encontrar la palabra correcta" tienen mucho sentido. Estamos tratando de encontrar la palabra apropiada o de recuperarla de nuestro cerebro. Cuando no hallamos esa palabra o no podemos recordarla, significa que tenemos problemas con la recuperación de palabras. Esto puede suceder incluso cuando conocemos bien una palabra y la utilizamos a menudo.
Es como buscar un libro en una biblioteca que no tiene un buen sistema de clasificación. Tenemos que buscarlo en todas las estanterías aunque sepamos cómo luce el libro.
Para que exista un problema con la recuperación de palabras es necesario que la persona conozca la palabra. No se puede utilizar una palabra que no se haya aprendido. Cuando no recordamos una palabra que conocemos es cuando hay un problema.
Profundice
Cuando una persona tiene problemas con la recuperación de palabras se puede manifestar de diferentes maneras. Estos son algunos ejemplos:
Un lapsus o error al hablar puede ocurrir cuando alguien dice palabras relacionadas de alguna manera a la palabra que quiere decir. Por ejemplo: “Se subieron a un auto grande. No, era como una camioneta. No, no, era un tren”.
Tener la palabra en la punta de la lengua puede ocurrir cuando la palabra adecuada no viene a la mente. En su lugar, la persona describe la palabra. Por ejemplo: “Ya sabes, esa cosa. La cosa en la que viajamos el otro día, ¿te acuerdas? Iba sobre rieles. Iba muy rápido y nos llevó a la ciudad”. (El tren)
Un error de representación de sonidos puede ocurrir cuando una persona sustituye una palabra por otra (real o inventada) que suena parecida. Por ejemplo: “Fuimos a la ciudad en el... ya sabes, me cuesta decir palabras largas, tramporte público” (transporte).
Puede que no siempre sea evidente de inmediato cuando los niños pequeños tienen problemas con la recuperación de palabras.
En lugar de tener de un lapsus o error al hablar, puede que utilicen gestos o que señalen las cosas para comunicarse. Dado que esto es típico en el desarrollo de los niños pequeños que están aprendiendo a hablar, es posible que las familias y las escuelas no noten las señales hasta que los niños sean mayores.
A medida que crecen, los problemas con la recuperación de palabras pueden causar problemas de conducta. Por ejemplo, un niño que se siente frustrado porque los demás no comprenden lo que dice puede tener un arranque de ira.
Las personas pueden tener dificultad para encontrar las palabras correctas por diferentes motivos. Una causa común entre las personas más jóvenes son las diferencias en la manera de pensar y aprender. Cualquiera de las siguientes puede afectar el habla:
Trastornos del lenguaje
Dislexia
TDAH
Desafíos con el funcionamiento ejecutivo
También hay otras causas posibles, en especial en los adultos. Estas son algunas de las condiciones que pueden crear dificultades para la recuperación de palabras:
Esclerosis múltiple
Accidente cerebrovascular
Daño cerebral
Deterioro de las funciones cognitivas
Impactos neuropsicológicos a largo plazo por Covid-19
Hay muchas maneras de ayudar a las personas que tienen problemas con la recuperación de palabras. Es importante observar si existen patrones. Tanto niños como adultos a menudo tienen dificultad para encontrar la palabra correcta en situaciones específicas:
Cuando están cansados.
Cuando están ansiosos.
Cuando están estresados o bajo presión.
Cuando están enfermos.
Por ejemplo, alguien que siente ansiedad social puede tener dificultad para encontrar las palabras correctas en situaciones sociales. Si usted puede identificar los patrones, puede desarrollar estrategias para cuando no encuentra una palabra. Saber que tiene un plan puede disminuir la ansiedad, lo cual puede facilitar que encuentre las palabras.
Con los niños pequeños que señalan las cosas o utilizan gestos para comunicarse, ayuda decir el nombre del objeto cuando usted se los da. Por ejemplo, si el niño señala el jugo, diga “jugo” al dárselo.
Con los niños más grandes, intente tener una conversación honesta sobre cómo les gustaría que usted los ayude. Algunos solo quieren que usted sea paciente mientras ellos están buscando la palabra. Otros quieren que usted pronuncie la palabra. Y hay quienes quieran usar una señal secreta cuando necesitan ayuda.
Otra manera de ayudar son los juegos. Juegos populares como Zingo, adivinanzas o “veo, veo” son maneras excelentes de ayudar a los niños a desarrollar vocabulario. Si bien los niños mayores o adultos puede que disfruten de los juegos, es posible que necesiten alguna práctica o terapia más específica.
