Cómo ayudar a su preescolar cuando está demasiado excitado
De un vistazo
Los niños que piensan y aprenden de manera diferente podrían ser más propensos a sobreexcitarse.
No existe una solución inmediata para detener la sobreexcitación de su preescolar.
Aprender a identificar las señales de que su hijo está demasiado estimulado puede ayudar a detener la sobreexcitación de raíz.
Es magnífico ver a su preescolar entusiasmado. Pero es diferente cuando su hijo está demasiado excitado. Los niños con ciertas diferencias en la manera de pensar y aprender como el TDAH pueden ser más propensos a sobreexcitarse.
Calmar a un preescolar que está demasiado excitado es un proceso. No hay soluciones rápidas, pero hay cosas que usted puede hacer que ayudarán con el tiempo.
Trate de usar las tres R: reconocer cuándo su hijo se está entusiasmando en exceso, registrar las señales de alerta y encontrar formas de responder cuando usted vuelva a observar las señales. A continuación, motivos comunes por los que su preescolar podría sobrexcitarse y cómo usted podría aplicar las tres R.
Su hijo está sobreestimulado
Reconocer: Su hijo está jugando al escondite. Los otros niños dejan de jugar pero él continúa persiguiéndolos, riéndose aunque los niños se enojen.
Registrar las señales: Su hijo se quedó ensimismado en el juego, gritando y riendo más fuerte que los demás niños. No pudo mirar a su alrededor y darse cuenta de que el juego había terminado y dejar de jugar.
Responder: Colóquese entre su hijo y los otros niños. Si a su preescolar no le importa que lo toquen, coloque sus manos sobre sus hombros y dígale: “El juego terminó. Me parece que te divertiste mucho, pero ahora es momento de parar”. Diríjalo hacia otra actividad.
Planificar para la próxima vez: Establezcan juntos una señal para ayudarlo a saber cuándo es momento de detenerse. Prevea avisarle con cinco minutos de antelación cuando note que se está alborotando y emocionando demasiado.
Su hijo está demasiado ensimismado
Reconocer: En una fiesta de cumpleaños su hijo se niega a dejar el juego de ensartar aros y hacer otra cosa. Mientras usted más insiste, más se enfada. Al poco tiempo empieza a patear y gritar.
Registrar: Su hijo está muy interesado en el juego. Mientras más tiempo juega, menos se da cuenta de que los otros niños le están hablando. No para de repetir: “¡Solo una vez más!”.
Responder: Si su hijo está teniendo una crisis, seguramente no aceptará su ayuda ni querrá irse del lugar con usted. Pídale a los demás que le den un poco de espacio y dígale a su hijo: “Me voy a sentar a tu lado hasta que te tranquilices”.
Planificar para la próxima vez: Cuando observe señales de que su hijo está demasiado ensimismando, interrúmpalo y avísele que le quedan diez minutos. Repítalo cuando queden cinco minutos y luego tres minutos. Cuando se acabe el tiempo, usted le puede decir: “¡Veo que lo disfrutaste! Ahora hay que pasar a otro juego”.
Su hijo tiene una fijación
Reconocer: En el parque otro niño está usando el columpio preferido de su hijo. Su hijo grita que le quitó “su” columpio y trata de empujarlo.
Registrar: Su hijo estuvo hablando toda la mañana sobre usar “su” columpio. Cuando vio al otro niño en el columpio, comenzó a apretar sus puños y a refunfuñar.
Responder: Aleje a su hijo del otro niño para que no ocurra un accidente. Intente decir: “Sé que querías columpiarte y que estás enojado”. Trate de dirigirlo hacia otra actividad: “Vamos a usar el tobogán hasta que ese niño deje de columpiarse”.
Planificar para la próxima vez: Prepare a su hijo. Intente decir: “Puede que un niño esté usando tu columpio favorito. Si es así, hay que ser paciente y esperar calmadamente o usar otro columpio. Si no puedes, nos tendremos que ir del parque”. Ayúdelo a darse cuenta de su reacción. “¿Te das cuenta de que estás apretando los puños? He visto que lo haces cuando comienzas a enojarte”.
Conozca más sobre cómo responder cuando su hijo tiene una idea fija con algo.
Puede que su respuesta no tranquilice a su hijo en el momento. Pero aprender a reconocer esas situaciones complicadas y registrar las señales de su hijo le puede ayudar a responder mejor en el futuro.
Puntos clave
Puede ayudar a su preescolar si acuerdan una señal para indicarle cuándo se está emocionando demasiado.
Lograr que su hijo sea más consciente de cómo actúa y se siente cuando se está sobreexcitando puede ayudarlo a mantener la calma.
Avisar a su hijo con anticipación que pronto tendrá que cambiar de actividad puede ayudarlo a prepararse y reducir las crisis.